Adiós a un querido Instructor de APAT

Palabras de Ricardo Rieiro:


El milagro que no fue.
Cuando un alumno se va, queda un espacio vacío que no se puede llenar con la llegada de otro alumno .......
Un gran dolor dentro de mi corazón.
Al cabo de muchos años he perdido algunos alumnos. Hace casi veinte años, NICOLAS (en un accidente), hace un par de años NAHUEL y su hermanito (en accidente) y ahora se me fue DANIEL, por una enfermedad cruel.
Enfermedad que lo fue deteriorando físicamente, pero no mentalmente, aunque me dió algunos indicios de que se estaba preparando.

Daniel compartió varios años de taekwondo junto a su hijo Santiago, de hecho, llegaron a cinturón negro al mismo tiempo.
Martes y jueves 8.15hs, bien temprano, les daba clase solo a ellos, en el Gimnasio Rh Cooperarios.
Docente de profesión.
Comenzó a enseñar taekwondo hace dos años, cerca de su casa, donde tuvo solo un par de alumnos. Al tiempo de descubrirsele la enfermedad, las internaciones fueron una constante y el tratamiento de la enfermedad fue haciendo mella en su cuerpo.
Pasaba el tiempo, la enfermedad avanzaba, pero sus ganas de seguir enseñando TKD, no disminuía.
Después de buscar lugar durante un tiempo, por fin obtuvo el si, en la sociedad de fomento Fleming, en Quilmes.
Yo quiero hacer esto, y luego que siga Santiago, me dijo. "Yo lo voy a acompañar hasta donde pueda" siguió.
Llegó el día. Miércoles 22 de abril, primera clase.
Me llama. " sabonim tenemos 13 alumnos", me informa. Estaba felíz.
No me imaginaba que esta primera clase también sería la última.
Sabonim: " el viernes me operan, necesito que me consiga un reemplazo por la semana que viene".
Le tenían que extraer el bazo, y parecía que en su mente era " abrir, sacar el bazo, cerrar e inmediatamente seguir con las clases".
Tranquilo Dani, recuperate, te consigo reemplazo para el tiempo que necesites, le respondí.
Parto a Chile, el 24 de abril y al día siguiente recibo el llamado de su esposa:
"sabonim, pregunta Daniel si le consiguió el reemplazo para los dos días".
Le contesto afirmativamente.
Pero el milagro no llegó, y el sábado temprano, partió.
Dani te voy a recordar siempre, espero que en el lugar que estés, te encuentres en paz.


Toda la escuela APAT se suma al cordial saludo a la familia de nuestro querido Instructor Daniel Vega.